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Vinata, deidad

Garuda, deidad

 

Vínculos de familia

Garuda, deidad

   Otros nombres para Garuda, fueron Garutmat, deidad y Suparna, deidad.

  Descripción:

Rey de las aves y transporte (montura) de Lord Vishnu.
También conocido como: Suparna (el de plumas rubias).

  Observaciones y comentarios:

  • En el Bhagavad-Gita (C.10, V.30) en medio de la batalla de Kurukshetra, El Señor Krishna, explicando su Omnipresencia, dice:
    "De los pájaros, Yo soy el hijo de Vinata", indicando así la importancia de Garuda.
  • El Srimad Bhagavata y otras escrituras dicen que el sabio Kasyapa, el progenitor de los dioses y demonios así como de las diversas especies sub-humanas, tuvo dos hijos de Vinata (la madre de la creación alada), por nombre Aruna y Garuda.
    De ellos, Aruna sirvió como cochero del dios del sol, mientras que Garuda fue elegido por Bhagavan Vishnu como Su propia montura o transporte.
    Aruna es el padre de Sampati y Jatayu, perteneciendo así al primer período de la historia del mundo.
  • Ravana rapta a Sita y Jatayu trata de socorrerla:
    [...] Cuando vio al buitre acercándose a él como la Muerte, el monstruo de diez cabezas se volvió y dijo:
    "¿Es el monte Mainaka o Garuda, el rey de los pájaros? ¡Este último conoce mi fuerza, y también su Señor, Bhagavan Vishnu!" [...]
    Durante el combate con el demonio Meghananda:
    [...] Entonces el sabio celestial Narada envió a Garuda, que no tardó en llegar al lado de Sri Rama.
    El rey de los pájaros capturó y devoró todas las serpientes creadas por el poder demoníaco de Meghanada.
    De esta manera el encantamiento fue disipado y todas las huestes de monos se regocijaron de nuevo. [...]
    En referencia al diálogo entre el cuervo Bhusundi y Garuda, Uma pregunta a Lord Shiva:
    [...] "Garuda es un ser altamente iluminado y una encarnación de virtudes; además sirve a Sri Hari y vive muy cerca de Él.
    Dejando a los sabios, ¿cómo se acercó a un cuervo y oyó de él la historia de Sri Rama?
    Dime cómo fue el diálogo entre el cuervo y Garuda, devorador de serpientes, ambos devotos de Sri Hari."[...]
    Lord Shiva responde a Uma:
    [...] Ahora escucha las circunstancias en las que Garuda, gloria del reino de los seres alados, visitó al cuervo.
    Cuando el Señor de los Raghus representó el juego de un combate con Meghananda, hijo de Ravana, cuyo solo pensamiento me llena de vergüenza, y se dejó atar por Meghananda, conquistador de Indra, el sabio Narada envió a Garuda.
    Cuando Garuda, devorador de serpientes, hubo cortado las ataduras y partió, un profundo abatimiento poseyó su alma.
    Acordándose de la atadura del Señor, el enemigo de las serpientes pensaba en el incidente así:

    "Se me dijo que había venido a este mundo el desapegado Brahma que todo lo penetra, el Rey supremo que está por encima de la Maya y el error. Pero yo no percibí nada de Su divina gloria.
    El mismo Rama, al repetir cuyo Nombre los hombres se liberan de los lazos del mundo, fue atado por un demonio insignificante que lo enrolló con serpientes".

    Garuda hizo todo lo que pudo para tranquilizarse, pero en él no se encendía ninguna luz que le permitiera ver claro, sino que, por el contrario, la duda ensombrecía cada vez más su alma.
    Desgarrado por este tormento y lleno de preguntas, cayó preso del engaño igual que te ocurrió a ti.
    En su perplejidad se dirigió al sabio celestial Narada y le hizo saber las dudas que aprisionaban su mente.
    Al oírle, Narada sintió mucha compasión y le dijo:

    "Escucha, Garuda: La Maya de Sri Rama es formidable; llega a robar a los sabios de su sentido y apoderándose de ellos, nubla su mente de una manera total.
    La misma Maya que a mí me engañó muchas veces te tiene cogido a ti, oh señor de la creación alada.
    Una vanidad cegadora ha echado raíces en tu corazón y no será eliminada fácilmente por mis palabras.
    Por lo tanto, acude a Brahma, el Creador de los cuatro aspectos, oh señor de las aves, y haz lo que él te ordene".

    Tras decir esto, el tan iluminado sabio se fue cantando la gloria de Sri Rama y acordándose una y otra vez del poder de la Maya de Sri Hari.

    Entonces el señor de las aves fue al Creador y le explicó su duda.
    Al oír su historia, Brahma se inclinó ante Sri Rama y se sentía desbordado de amor al darse cuenta de Su poder.
    El Creador decía para sí:

    "Todos los visionarios, sabios y eruditos, están dominados por Maya. Ilimitado es el poder de la Maya de Sri Hari, que a menudo me ha convertido en un títere. Esta creación entera ha evolucionado por mí; no es de extrañar entonces que el rey de las aves haya sido engañado por ella".
    Tras lo cual Brahma le dijo:

    "El gran Señor Shiva conoce bien la gloria de Rama. Así pues, hijo de Vinata, ve a Sankara, Shiva, y no preguntes a nadie más. Sólo en Él se aclararán tus dudas".

    Al oír el consejo del Creador, el pájaro emprendió el vuelo.
    Entonces, el señor del reino alado vino a mí lleno de tristeza.
    Por entonces yo iba a la residencia de Kubera, y tú, Uma, estabas aquí en el Monte Kailasa.

    Él se postró a mis pies y me contó su duda. Al oír su muestra de sumisión y respeto, le contesté amorosamente:

    "Garuda, me has encontrado en medio de un camino, ¿cómo te voy a enseñar en esta situación?
    Las dudas sólo desaparecen completamente cuando se disfruta de la compañía santa durante mucho tiempo y se escucha la deliciosa historia de Sri Hari, cantada siempre por los sabios, cuyo único tema, al principio, en el medio y al final, es el divino Señor Sri Rama.
    Así pues, te enviaré a un lugar donde se recita la historia de Sri Hari cada día; ve allí y escucha. Entonces todas tus dudas se desvanecerán y en ti nacerá un amor intenso por los pies de Sri Rama.
    Sólo entre los santos se habla de Sri Hari, y sólo a través de esas palabras puede uno deshacerse de su error.
    Y hasta que el error no se disipa, uno no puede tener un amor profundo a los pies de Sri Rama.
    El Señor de los Raghus sólo se encuentra con amor, y no porque practiques Yoga o penitencias austeras cultives el desapego o la sabiduría espiritual.
    Al Norte hay una hermosa montaña azul llamada Nilagiri, donde vive el buen Kakabhusundi, muy avanzado en el camino de la devoción a Sri Rama, iluminado, lleno de buenas cualidades y muy anciano.
    El recita sin cesar la historia de Sri Rama, y nobles aves de diferentes especies la escuchan con reverencia.
    Ve allí y escucha las múltiples virtudes de Sri Hari; así tu mal desaparecerá.


    Cuando le hube dicho todo claramente, Garuda se inclinó a mis pies y partió con alegría.

    Uma, yo no le enseñé por mí mismo, porque por la Gracia de Sri Rama descubrí el secreto del engaño de Garuda.
    En alguna ocasión él se dejó llevar por su orgullo y evidentemente el Todomisericordioso deseaba curarle de él.

    Además, había otra razón por la cual yo no le retuve: un pájaro sólo puede entender el lenguaje de otro pájaro.
    Bhavani, la Maya de mi señor, es formidable; ¿hay alguien tan sabio que no pueda caer en su engaño?

    Incluso Garuda, joya de los devotos y almas iluminadas y montura del Señor Vishnu, soberano de las tres esferas, fue engañado por Maya; qué absurdo es entonces que los pobres mortales se crean inmunes a su poder.

    La Maya del Señor engaña hasta a Shiva y Brahma; ¿qué puede hacer ante ella una pobre criatura?

    Sabiendo esto, los sabios adoran al divino Señor de Maya.

    Garuda fue a la morada de Bhusundi, Kakabhusundi, de intelecto inigualable y devoción constante a Sri Hari.
    Al ver la montaña, su corazón se regocijó y se vio libre de toda Maya, engaño, vanidad y ansiedad.

    Después de bañarse en el lago y beber de sus aguas, se sentó bajo el árbol banyan con el corazón feliz.
    Viejos pájaros de todas clases se reunían allí para escuchar las hermosas hazañas de Sri Rama.
    Bhusundi estaba a punto de comenzar la narración cuando llegó el rey de las aves.

    Todos se regocijaron al ver acercarse al rey de toda la creación alada, el cuervo igual que los demás.
    Bhusundi lo recibió con gran reverencia y después de preguntarle cómo estaba, le condujo a un sitio escogido.
    Y tras adorarle, el cuervo se dirigió a él con palabras dulces como la miel:

    "Mi señor, al verte he sido bendecido; ahora déjame hacer lo que tú me ordenes, oh rey, ¿Con qué objeto has venido, maestro?"

    "Tú siempre has sido una imagen bendita -contestó el Señor, y siguió- y el Señor Shiva te alabó con Su propia boca".

    "Escucha, querido padre: el objeto de mi venida ha sido cumplido ya totalmente, y también he tenido el privilegio de verte.

    "Al ver tu santísima ermita, mi vanidad, duda y falsas ideas, se han borrado.
    Ahora, nárrame la sagrada historia de Sri Rama, que siempre es deliciosa y alivia de todos los sufrimientos.
    Esto es lo que deseo pedirte."

    Cuando Bhusundi oyó la petición de Garuda, tan humilde, sincera, amorosa y piadosa, un gozo supremo se esparció por toda su alma y empezó a relatar las virtudes de Sri Rama, Señor de los Raghus. [...]

    [...] Cuando oyó la historia de Sri Rama, la mente de Garuda quedó extasiada y dijo:

    "Mis dudas se han ido ahora que he escuchado la historia de Sri Rama. Y por tu gracia, oh gran cuervo, ha surgido en mí la devoción a los pies de Sri Rama.
    Cuando vi al Señor me poseyó un desconcierto muy grande y me dije: Sri Rama es el Conocimiento y la Dicha personificada, ¿cómo puede El estar en apuros?

    Como me pareció que su forma de actuar se parecía tanto a la de un ser humano, nació una duda en mi alma.
    Ahora veo que ese error mío fue una bendición y siento que el Todomisericordioso me concedió un favor al caer en ese error, pues sólo el que se siente terriblemente oprimido por el calor del Sol puede valorar la bendición de un árbol tupido Si no hubiera sido presa de tan gran vanidad, ¿cómo te hubiera podido encontrar, gran Señor, y cómo hubiera tenido la oportunidad de oír la historia tan encantadora y maravillosa de Sri Rama que tú me acabas de cantar con todo detalle?

    Los Vedas, Tantras y Puranas son unánimes en esto, y así lo declaran los Siddhas y sabios en términos bien claros, al decir que la compañía de los santos sólo la alcanzan aquellos que son del agrado de Sri Rama.
    Por la gracia de Sri Rama he sido bendecido al verte y por tu bendición todas mis dudas han desaparecido."

    Al oír las palabras de Garuda, tan modestas y afectuosas. el cuervo se regocijó sobremanera: todo el vello de su cuerpo se erizó y las lágrimas se agolparon en sus ojos.

    Uma, continúa Shiva, los santos revelan sus más profundos secretos cuando encuentran a alguien que escuche, que no sea sólo inteligente, virtuoso y piadoso, sino aficionado a oír la historia de Sri Rama y devoto de Sri Hari. [...]
    Diálogo entre el cuervo Bhusundi y Garuda:
    [...] "Sri Rama es un océano de innumerables virtudes. ¿Puede alguien ver su profundidad?
    Yo sólo te he contado lo poco que he oído de los santos.
    El Señor es atraído sólo por la Devoción sincera y es una fuente de gozo y morada de compasión.
    Así pues, dejando los apegos mundanos, la vanidad y el orgullo, siempre se debe adorar al Esposo de Sita.

    El señor de los seres alados se regocijó al escuchar las agradables palabras de Bhusundi y agitó su plumaje.
    Las lágrimas acudieron a sus ojos y su alma se inundó de gozo al meditar en la gloria de Sri Rama.
    Acordándose de su antiguo engaño se llenó de remordimiento al pensar que había tomado al eterno Brahma por un simple mortal. Una y otra vez se postraba a los pies del cuervo amándole cada vez más pues sabía que era tan bueno como Rama.
    Sin un guía espiritual, nadie puede cruzar el océano de la existencia aunque sea igual que Virañchi o al Señor Sankara.

    Y Garuda dijo: "Fui mordido por la serpiente de la duda, querido padre. Y como consecuencia sufrí grandes ilusiones. Pero el Señor de los Raghus, deleite de Sus devotos, me ha salvado enviándome a ti.
    Por tu gracia ha cesado mi infatuación y he aprendido el incomparable misterio de Sri Rama". [...]